28 de noviembre de 2008

* * * En una CÁRCEL DE AMOR * * *


"Mi cuerpo es tu cuerpo,
mi casa es tu casa
y tuyos son los frutos de mi huerta.

Tu vida es mi vida,
tu libertad es mi libertad
y tu felicidad me hace feliz.

Te marqué las fronteras:
el confín del horizonte
y la bóveda del cielo.

Laten ahora en armonía
mi entendimiento y mi memoria
mi voluntad y mi corazón.

Y tú ya no tienes adónde escapar"


(Fernando Lanzas)


Música de Rumi y Luz del Alma



Estaba muerto, volví a la vida; sólo lágrimas era, me troqué en risa,
me llegó la fortuna del amor, y, por su gracia me hice eterno.
Visión madura hallé, visión madura y alma valerosa,
hallé la valentía de un león, y en fulgurante Venus me troqué.

Me dijo: "No estás loco y no eres digno de esta morada"
Me fuí y me volví loco, atado con la cuerda.
Me dijo: "no estás ebrio, vete, porque no eres de los nuestros"
Me fui y me embriagué, totalmente colmado de alegría.
Me dijo: "No estás muerto, no estás lleno de gozo".
Y ante su rostro vivificador, me caí muerto.
Me dijo: "Eres astuto y emborrachado andas de dudas e ilusiones"
Y me volví sencillo, me volví temeroso, y me aparté de todos.
Me dijo: "Te has convertido en vela y en alquibla de un grupo"
No soy de ningún grupo y no soy una vela, me esfumé como el humo.
Me dijo: "Eres maestro y sheij, señor y guía"
No soy shej, no soy guía, soy un esclavo de tu voluntad.
Me dijo: "Tienes alas y plumas, por eso no te doy plumas ni alas"
Deseando sus alas y plumas, me arranqué cualquier pluma y cualquier ala.
Me dijo: el que es mi nueva suerte: "No te apresures ni te ocupes de ti mismo,
porque yo, bondadoso y generoso, soy tu único futuro"
Me dijo el que es mi amor eterno: "no te alejes de mi lado"
Contesté: "No lo haré, no, no y no". Quieto permanecí.
Tú eres fuente del sol; yo, la sombra del sauce,
cuando tú me cubriste con tu ardor, ardiendo me encogí.
Halló mi corazón la luz del alma, se abrió y se dilató mi corazón,
halló una nueva imagen y enemigo de este menesteroso me volví.
La imágen de mi alma, gozosa a media noche, empezó a presumir:
"Yo era un esclavo maniatado, pero en rey y señor me convertí"
La rueda celestial da las gracias al rey del cielo y tierra:
"Gracias a su bondad y esplendidez, iluminado y generoso me volví.
Soy tuyo, ¡oh luna iluminada!, mírame a mí y en mí,
que, por tu risa, en risueña rosaleda me convertí.

Parte II. Diwan, gazal núm 24.





Recuerdo la Luz y la Música de Sus Palabras por la playa de Ipanema,

un 25 de septiembre,

Al Amanecer

Todo adentro transcurrió rápido
y sim embargo habían pasado cinco horas cuando regresé.

Y con la tumba atrás nos tocará Bailar

la la la

¡¡¡ !!!