Las raíces son amargas,
y los pétalos dulces
y los pétalos dulces
casi tanto como el polen
que ceden al viento.
El amor guarda un sabor dulce.
El amor guarda un sabor dulce.
Pero si se acaba el agua se estanca
y se transforma en la famosa bilis negra.
Dulzura en el comienzo,
amargura en el fin...
El Amor que ríe permanece en vaiven, siempre en el Medio.